sábado, 24 de octubre de 2015

Soñaba con los árboles del pasado.



Llovía. Soñaba con los árboles del pasado. 

El reflejo en el suelo mojado. 

Nada más.

Una ilusión, Sor Austringiliana.

jueves, 15 de octubre de 2015

La historia de un membrillo












¿Qué hacer con un membrillo? Un solo membrillo.

Ayer compré en la frutería un membrillo, uno solo porque ando peleando con la báscula y hay que echar mucho azúcar. Pedí a la frutera que me lo eligiera bien bonito, que era para una foto. Le hablé del blog y de la novela de Cervantes. Menos mal que la chica ya me conoce y me tiene por persona de juicio. 

Llegué a casa y el membrillo cumplió su misión: posar para las fotos de la entrada de esta semana. Ya sabéis: el licenciado Vidriera come un membrillo envenenado con un filtro amoroso, un "veneficio" añadido por una misteriosa dama que se lo quiere beneficiar, ya sabéis.

Después del posado, no sabía qué hacer con la fruta partida. Al final lo trituré en la picadora, le eché azúcar, canela, al fuego y...repartí el escaso postre entre dos platitos. Se lo comieron, yo no, que ya os he dicho lo de la báscula. Rápido y rico rico.

Un membrillo nada venenoso, nada que ver con su colega cervantino.

Un saludo, ya que paso por aquí, Sor Austringiliana.

sábado, 10 de octubre de 2015

Llovía y hacía viento, Sor Austringiliana.

















Llovía y hacía viento, Sor Austringiliana. 

Botones rojos, amarillo que vuela y navega, verde que gotea y viento que agita los árboles. 

El paseo del domingo pasado en La Quinta.